Expediente abierto. capítulo XI.

 

Un claustro.

Existe una rama de la matemática que se ocupa de medir la relación de cercanía entre los objetos, sin necesidad de usar números o figuras. Es la Topología una ciencia abstracta, que trata de aproximaciones en el espacio, entornos cercanos a un punto y cosas parecidas... ciencia dificil de entender pero con gran cantidad de aplicaciones en el mundo real.

Por ejemplo, en el caso de la política, sus actores buscan siempre estar lo más cerca posible del poder para beneficiarse. Ellos se valen de medios muy sutiles para aproximarse al centro del poder, desplazándose hacia el entorno poderoso, de manera sigilosa y de acuerdo a sus posibilidaddes. Para ello forman los grupos que son como abejas volando alrededor del centro de un panal o cometas que se aproximan al sol viajando en orbitas parabólicas. Una vez hecha esta pequeña aclaratoria podemos dar inicio a este capítulo quizas algo vicioso y perverso, para los que no conocen estos ambientes...

Fer llegó temprano a trabajar en sus investigaciones,como ya era una costumbre adquirida desde su época de estudiante de postgrado. Después del sueño la mente queda libre y descansada. El cerebro funciona muy bien como una máquina recién aceitada, algo favorable para los complejos razonamientos lógicos y las ideas abstractas.

La visita inesperada del jefe del departamento, quien saludó con una cara risueña, lo sacó de su meditaciones. Salto de su asiento disparado como un resorte, pues le sorprendió recibir a alguien tan temprano. El jefe venía a verle sin propósito alguno, dispuesto a conversar sobre cualquier cosa. Parado al lado de la puerta comentaba

-Esta mañana temprano la Facultad era en un caos.- ¿Te diste cuenta Fer?Amaneció sin luz, y todos se quejaban de la mala calidad de los servicios de electricidad. La gente andaba malhumorada por los pasillos, echando chispas.

-Si. Es cierto. Amanecimos sin luz. Cuando llegué temprano todo estaba en tinieblas.

Al margen de todo aquello, Fer , reugiado en su despacho desde temprano, pudo trabajar iluminándose con una linterna de pilas. Ahora era de día y abrió las ventanas para dejar entrar la luz. Invitó al Jefe a pasar adelante y le ofreció una silla. Después de sentarse frente al escritorio y tomar una taza de café comenzaron a charlar. Primero hicieron un recorrido por la situación política y la economía del pais. Hablaron de la crisis bancaria que llevaba varios meses sin poderse resolver, la fuga de los banqueros corruptos al exterior y las ayudas fianacieras del gobierno que iban a parar al bolsillo de los mismos banqueros.

-Los pobres ahorristas pagamos los platos rotos, como siempre. Sentenció el jefe.

-¿Que pasa con la justicia que no termina de castigarles? Deberían ir presos todos ellos por ladrones. Los jueces y los tribunales tienen las pruebas en la mano. Pero nada. Además hay miles de denuncias de ciudadanos que han perdido sus ahorros. Algunos han quedado en la ruina. Están golpeando duro a la clase media. Pienso que es una gran estafa programada con la ayuda de un gran monstruo que succiona los billetes y se los traga.

-Jajaja- Que cosas tienes Fer. Respondio el Jefe golpeando la mesa.

Por alguna razón,la conversación tomó un giro inesperado y recayó sobre los hilos del poder en la institución. Aprovechando esto, Fer comenzó a tantear el terreno para conocer algunos detalles sobre la posibilidad de un expediente, sin delatarse. El jefe fue quien habló de primero

-La Universidad, en teoría, es cómo una pequeña república en donde todos viven felices pues se practica la democracia para decidir sobre cualquier cosa, aun sobre los detalles más pequeños. Las decisiones se toman por mayoría en los distintos concejos o reuniones de cada gremio. A veces estos consejos se convierten en largos torneos de oratoria en donde los más hábiles sacan a relucir sus conocimientos de retorica y logran convencer a la mayoría. Esto ha propiciado el surgimiento de “abogados” expertos en ganar causas de todo tipo o líderes que son respetados por la comunidad.

Dentro la universidad convivían varios grupos de poder. En primer lugar están los catedráticos más antiguos. Ellos son Los Jefes de La cátedra. Son fuertes y duraderos. cuentan con una serie de poderes y privilegios derivados de la vieja tradición de jefes de cátedra vitalicios. Su autoridad y prestigio son indiscutibles y reconocidos por todos. Se consideran dignos herederos de los primeros fundadores jesuitas de aquella vetusta institución religiosa del siglo XVIII ( Un Colegio Tridentino en donde se enseñaba, retorica, derecho canónico y gramática latina) que luego se convirtió en Universidad. Durante todos los actos académicos esto señores se sientan en las primeras sillas. Generalmente son oradores de orden en cualquier celebración importante en el Aula Magna.

-¿ Y porque tanto poder acumulado en pocas manos?- interrogó Fer.

- Bueno, eso es irremediable. Se sospecha que guardan el arca sagrada del conocimiento en algún lugar secreto del edificio del rectorado. Ademá presiden los rituales de grado de los nuevos licenciados en donde se confieren los títulos.

-Un día – interviene el Profesor Fer - visité el edificio del Poder. Despues de traspasar el umbral, subía y bajaba por largas escalinatas y di varias vueltas por el claustro, como hacian los monjes en aquellos vetustos monasterios medievales. Pude recorrer todos los rincones del edificio. Largos y oscuros pasillo con algunas puertas laterales que se abrian a o tras galerias, sin puertas ni ventanas. Escaleras ricamente decoradas con balaustres de marmol rosado y pasamanos de bronce. Mientras yo me entretenía mirando todo aquello, un empleado oficial me espiaba desde lejos ocultándose entre las arcadas. Descubrí algo que me sorprendió: Una biblioteca de libros antiguos todos en latin amontonados unos sobre otros, formando torres muy altas. Al final de un pasillo había una galería en un salón lateral en donde estaban sus retratos pintados al oleo para la posteridad.

Libros. Francisco Rivero. 2025.

-Para cumplir con sus delicadas funciones de autoridad cuentan con un ejercito de ordenanzas, autos de lujo, porteros, chóferes, secretarias, periodistas de los distintos medios de comunicación del estado, músicos, cocineras...etc. El mantenimiento de este tren de empleados consume una buena parte del presupuesto universitario, pero la gente lo acepta como algo normal, pues la majestad de aquellos altos cargos, así lo requiere.

El jefe continuó extendiéndose en el tema del poder y los caminos hacia su entorno misterioso y sus vericuetosy Fer prestaba atención como un buen estudiante.

Aparte de aquel grupo de notables existían otros grupos que se fueron formando poco a poco, quizás por la fuerza natural de las afinidades electivas. Las afinidades electivas son un concepto que se refiere a la relación entre dos o más elementos que se atraen o se repelen según ciertas propiedades o leyes naturales. Es una relación dialéctica que no se basa en la causalidad directa o la influencia, sino en una similitud o situaciones de estructuras complementarias, valores o intereses. Como dice el dicho, Dios los creó y ellos se juntan. Hay un grupo de jóvenes profesores y estudiantes anti sistema que lucha por la justicia social dentro de la Universidad. Ello van en contra de todo lo tradicional. Proponen un sistema de gobierno completamente libre y democrático, donde todas las decisiones se tomen en asambleas, donde participan además de profesores, los estudiantes, empleados, obreros, amas de casa y público en general. Esta utopía revolucionaria se inspira en modelos marxistas leninistas de los primeros años de la revolución soviética, la revolución sexual de los 60, las religiones de la India, los movimientos pacifistas y el movimiento Hippie. Justifican cualquier método de lucha para llegar al poder, destruyendo las viejas estructuras del sistema que se oponen a los cambios. Lo llaman El Grupo K.

Dentro de este grupo estaban los individuos alpha, los más inteligentes y dotados. Son Gente algo elitista, de mucho prestigio. Ciertamente, y esto no se puede ocultar, han hecho estudios de Ph.D en en las mejores universidades , todos ellos becados por el gobierno. Son investigadores de amplio currículo, que mantienen contacto con colegas en otras instituciones del mundo. Viajaban mucho a congresos internacionales a presentar trabajos. Entre ellos destaca Nidia Nadia una hembra alpha de carácter recio que ejerce las funciones de portavoz del grupo. Ea una mujer temida en los consejos por sus posiciones radicales e inflexibles ante las exigencias de los estudiantes. Defendía la propuesta, nunca aprobada, de que ningún estudiante podía aplazar un curso de la carrera so pena de ser expulsado por cinco años. En los Consejos de Facultad atacaba y presionaba con fuerza para lograr sus objetivos. Es una mujer guerrera, todo terreno. Hay que andarse con cuidado con ella. Aplasta a sus adversarios sin piedad. Siempre sacaba a relucir su titulo de Doctorado en la Universidad de Stanford en California, y de como trabajó muy duro para aprobar los exámenes de calificación.

-Impresionante todo esto, parece una novela de ficción. Siento algo de claustrofobia. Abriré una ventana para respirar mejor. Esto me hace recordar la Mundo Feliz de Aldous Huxley. Pero ¿ Que pasa con el resto del personal? ¿ Es que acaso hay más grupos?

El jefe hizo una larga pausa, se sirvió otra taza de café y continuó aportando detalles.

Por debajo de los alpha estaban los epsilon, llamados los enanos, un subgrupo de gente de poca monta, que vegetaban en la universidad esperando su jubilación. Los epsilon eran bastante numerosos y hacían el trabajo sucio de enfrentarse a manadas de estudiantes en aquellos cursos de los primeros semestres. Todo epsilon era un incondicional de los alpha. Siempre listos para cualquier convocatoria que algún asunto serio los requiriese. Su capacidad de movilización como un grupo compacto y monolítico era impresionante. En menos de cinco minutos podías llenar un auditorio de doscientas personas. Por todo esto eran temidos.

Finalmente concluyó con algo de modestia y humildad en sus palabras.

-Bueno Fer , tanto tu como yo no pertenecemos a grupos. O mejor dicho, estamos en un tercer grupo, carente de programa, nombre o identidad propia. Somo los auto excluidos que evitamos la confrontación de proyectos e ideas. Siempre nos comportamos de manera imparcial e independiente en las reuniones, somos bastante sociables, de mente analítica y actuamos de acuerdo a la ley y los principios morales. Compartimos algunas cosas como cierto gusto desmedido por la cerveza, pues nos reunimos muy a menudo en el viejo bar llamado Don Quijote, hacia las afueras de la ciudad. Algunos nos critican por esta forma de ser tan informal. A causa de mantener esta actitud irreverente y neutral, los del Don Quijote nunca alcanzamos las altas posiciones de poder.

El profesor Fer era uno de sus miembros, aunque mantenía contacto con el bando opuesto. Si se hubiese integrado al grupo K, pudiese haber viajado mucho más a congresos y disfrutar de años sabáticos en países lejanos, financiado por la Universidad. Pero viendo las cosas desde el punto de vista sentimental, su libertad estaba por encima de aquellas prebendas.

Finalmente estaba el grupo K2, la rama estudiantil del grupo K, compuesto por jóvenes aguerridos que servían de apoyo a sus mentores. Sus enemigos declarados eran los del Movimiento 20, otro grupo estudiantil más numeroso y de tendencias conservadoras. El Movimiento 20 era una maquinaria electoral muy eficiente. Ningún candidato a Rector podía llegar al poder sin la ayuda de este grupo que capturaba los votos estudiantiles.

Al llegar la luz, el Jefe se despidió y Fer quedo sumido en profundos pensamientos.