Siempre en apuros. Esta vez fue un sacapuntas..
La gente no pudo entrar aquel día gris al edificio de ladrillos rojos. El encargado de abrir las rejas del gran estacionamiento no apareció hoy. El hombre se quedó dormido no responde al teléfono y nadie sabe donde anda. El personal deja los carros aparcados afuera y camina por la calle en medio de un fuerte temporal de lluvia e ingresa al edifico de ladrilos rojos por una pequeña puerta lateral. Un profesor cruza la calle de manera imprudente y casi es atropellado por un carro.
Hoy es viernes y se nota en el ambiente. La Universidad pagó la quincena de sueldo a todos los empleados y adicionalmente un dinero extra, de una deuda de manera retroactiva. Se respira en el ambinete una agitación muy particular. El personal de una universidad el día viernes por la tarde se comporta de manera diferente. Hay un fuerte deseo de salir del lugar y olvidarse de todo, comenzar a sentirse libre de la rutina diaria. Abandonar el lugar de trabajo. ¿ Cómo se comporta la gente los viernes? No hay una respuesta única para esta pregunta, ya que depende de muchos factores, como el tipo de trabajo que realizan, el nivel de estrés que tienen, el ambiente laboral, los planes que tengan para el fin de semana, etc. Sin embargo, se podría decir que en general, el personal de una universidad se siente aliviado y contento de terminar la semana laboral y poder disfrutar de su tiempo libre.
Algunas personas pueden sentirse cansadas o aburridas después de una larga jornada de trabajo, mientras que otras pueden sentirse motivadas o entusiasmadas por algún proyecto o actividad que les guste. También puede haber personas que se sientan ansiosas o tristes por tener que enfrentarse a sus problemas personales o familiares.
Lo normal es que cada persona encuentre una forma de relajarse y divertirse el fin de semana, ya sea haciendo ejercicio, saliendo con amigos, disfrutando de una parrillada o una pequeña fiesta en su casa para celebrara algún acontecimiento, leyendo un libro, viendo una película, etc. Así podrán recargar sus energías y estar preparados para la siguiente semana.
El cielo de color gris plomo comenzaba a despejarse de nubes que se formaban en la serranía. Por encima del barranco vuelan muy alto algunos cóndores.
Fer se dirige hacia la dirección de la Facultad para recoger su correo en el casillero. El nuevo ordenanza ha traído las cartas hoy de manera muy puntual. Es un joven recién contratado que hace todo muy bien para ser ascendido. Siempre se presentan problemas con este tipo de personal. Su trabajo consiste en recorrer a pie toda la ciudad llevando las correspondencia universitaria. A veces se ausentan sin justificación alguna y son despedidos o transferidos a otras dependencias. Todavía no ha recibido el listado de sus estudiantes. Le comenta al ordenanza sobre este retardo, a manera de reclamo y el joven se excusa diciendo que aun no le han entregado los listados desde la dirección de administración estudiantil.
-Usted sabe Profe, esa gente trabaja muy bien, pero se mantienen haciendo paros y huelgas- responde con una sonrisa buscando la aprobación con una mirada no exenta de picardía.
En verdad, lo que más lo motiva al Profesor Fer a visitar tan temprano a las secretarias, es sacarles información, para enterarse de los detalles del caso de Alido.
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| SEcretaria. Francisco Rivero. 2025. |
-Buenos días- saluda a un par de secretarias que están bastante ocupadas con la redacción de un oficio.
- Ajá copie allí.- dijo la secretaria robusta- “La universidad de la Sierra con más de 300 años de fundada y que cuenta con una población estudiantil de unos 30 mil y algo más de 3 mil profesores”.
Espera un momento necesito un lápiz.
- ¿Qué paso con el sacapuntas? Ayer estaba sobre mi mesa y hoy no lo veo. Parece que se desapareció o se lo llevaron. Haré un oficio solicitando uno nuevo, a la dirección de presupuesto. Es el tercer sacapuntas que se pierde este año.
- ¿Universidad es con mayúscula o minúscula? – interrogaba la más joven.
- Es con minúscula.
-Siga copiando “la Facultad de Humanidades ocupa un conjunto de edificios al norte de la ciudad de Tunyah. La Universidad de La Sierra es una universidad pública y autónoma ubicada en el corazón de los Andes bolivianos”.
-Espera, espera, que vas muy rápido. Esto es para mañana.
-Profesor Fer, mañana no hay clases, pues se celebra el día de los trabajadores gráficos- interrumpió la más joven. Profesor, tiene una mancha negra en su chaqueta.
-Okey, la tomaré en cuenta. ¿Todavía no ha llegado el correo?
-No. Es muy temprano- responde la de mayor edad en tono seco e indiferente.
-Sigue copiando, pues “Su sede principal y rectorado se ubican en la ciudad de Tunyah. Fue fundada por un obispo jesuita como casa de estudios el 29 de marzo de 1685, elevada luego a seminario y finalmente reconocida como Universidad el 21 de septiembre de 1810 bajo decreto expedido por la Junta Gubernativa de la provincia de la Corona de España”.
De la pequeña oficina situada al lado llegaban unas voces, ruidos y música a volumen muy alto e impedían escuchar las palabras.
-Que música es esa tan estridente. Apaguen ese radio por favor- Gritó una secretaria.
-Estamos practicando el baile del cha cha cha para una obra de teatro- Respondió desde adentro otra secretaria. Luego, con una voz clara y directa, llena de autoridad, emitió una orden a todas sus compañeras
-Mejor para todo ese trabajo de inmediato, pues nos llaman para una asamblea de empleados en el decanato. Hasta luego Profe.

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